Cerrando la vuelta desde Puerto Montt
Como todo en la vida misma, las cosas llegan a su fin y ahora nos toca la vuelta a casa. No sin seguir disfrutando de los paisajes y lugares con los que nos sorprenda un nuevo camino.
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| Túnel Las Raíces – Chile |
Emprendemos el camino, saliendo desde Puerto Montt remontando la autopista 5 con dirección hacia el norte de Chile. La ruta se encuentra en muy buen estado y en permanente estado de mantenimiento en diferentes tramos aprovechando la época veraniega.
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| Ruta en mantenimiento con carriles reducidos |
Remontando la vía 5 encontramos diversas novedades en su traza, por ejemplo: puentes peatonales sobre-elevados en varios tramos que permiten al peatón cruzar de un lado al otro de la misma sin riesgos, lagos a la vista desde la ruta, muchos sembradíos y campos para cría de ganado en sus alrededores, industrias y envasadoras, varias estaciones de servicio (bencineras, gasolineras) muy completas, con buena limpieza y trato de los empleados; entre otras cosas (como un pequeño incendio forestal entre Quepe y Metrenco, en las cercanías de Temuco).
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| Lagos desde la autopista, al fondo la cordillera |
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| Ruta 5 y paradas para transporte público (vista desde paso peatonal) |
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| Envasadoras/Productoras de sidra sobre ruta 5 |
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| Campos de cultivo y cría de ganado |
Al llegar a la localidad de Temuco rodeamos la ciudad, de más de 250.000 habitantes, y tomamos la ruta S-11-R que nos llevará hacia el este, buscando la ruta 181 y la cordillera de Los Andes. En la misma seguimos disfrutando de la amplia campiña que posee Chile en esta zona y -como no podía ser de otra manera, según lo que ya dijimos- pasar por diferentes cortes parciales de ruta por mejoras y mantenimiento.
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| Ruta S-11-R rumbo a la ruta 181 |
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| Llegando a Curacautín |
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| La tranquilidad y belleza de la ruta interrumpida por las necesarias mejoras en los trazados |
Cuando arribamos a Curacautín, atravesando la ciudad, encontramos el final de la ruta actual e ingresamos a la ruta 181 que nos conducirá hacia el túnel «Las Raíces» (distante unos 45 km de la ciudad) y continuando por esa ruta tomaremos rumbo al cruce hacia Argentina denominado «Pino Hachado».
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| Ruta y paisajes sobre ruta 181 |
El túnel Las Raíces está ubicado en esta Región de la Araucanía. El mismo fue construido en 1939 para conectar las comunas de Curacautín y Lonquimay. En sus inicios fue un túnel ferroviario, reconvertido a vehicular. Tiene una longitud total de 4528m y está excavado a 1010 m s.n.m., atravesando la Cordillera de Las Raíces (precordillera de Los Andes). El túnel es -en la actualidad- el 6° túnel carretero más largo de Latinoamérica y el más largo de Chile.
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| Túnel «Las Raíces» Curacautín-Lonquimay |
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| Mas de 4.5 km de Túnel nos esperan |
Un par de cosas a tener en cuenta: El túnel es de una sola mano, así que el paso es alternado. Desde el lado de Curacautín, solo hay una barrera y un semáforo que indican cuándo se puede pasar hacia el otro lado… al llegar del lado de Lonquimay: sorpresa! Cabina de peaje para pagar cuando uno SALE del túnel y la real sorpresa es que no aceptan pago que no sea efectivo en pesos chilenos. Tenerlo previsto para que no les pase como a nosotros, que habíamos gastado casi todo el efectivo en plata chilena -a estas alturas, casi del lado argentino- y veníamos pagando con tarjetas sin problemas… por suerte una pareja chilena del auto detrás del nuestro -amablemente- pusieron los pesos chilenos que nos faltaban para pagar y pudimos pasar sin problemas… pero es un detalle a tener en cuenta.
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| Ruta desde Lonquimay hacia Pino Hachado |
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| Llegando a aduana/migraciones chilena |
Luego de hacer aduana y migraciones en el lado chileno comenzamos a ascender la cordillera hacia el cruce. La ruta trepa, comenzado a seguir el río Pino Hachado por su ribera, hasta los 1884 m s.n.m., brindando paisajes que van pasando del frondoso verde del lado chileno hacia el seco y amarronado del lado argentino (principalmente provocado porque la cordillera «tapa» y recolecta toda el agua que el océano pacífico brinda con su humedad desde aquel lado).
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| Cordillera desde el lado chileno y el río Pino Hachado |
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| Cordillera ya ingresando al lado argentino |
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| La ruta y la zona vistas desde las alturas del cruce |
Una de las precauciones que hay que tener en este paso son las muchas curvas y los fuertes vientos laterales que presenta, que se advierten en toda la señalética vertical. Hay que tenerlo en cuenta, no ignorarlas, y no combinarlas con cansancio o distracciones.
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| Fuertes vientos laterales y curvas |
Algunas zonas del paso y su zona -sobre todo llegando a la zona argentina- recuerdan a películas del período jurásico por su cantidad de araucarias esparcidas por las laderas de las montañas. Las araucarias deben su nombre a que el árbol se presenta en la zona de la Araucanía (lugar de Araucanos, que es la forma en que los españoles denominaron a los pueblos originarios mapuches) y sus semillas son usadas por esos pueblos.
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| Araucarias en la ladera |
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| Araucaria: recibe su nombre por los «Araucanos» |
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| Paisajes jurásicos en plena cordillera |
Después ingresar a Argentina y ya sobre la ruta 242 nos dirigimos hacia la localidad de «Las Lajas» luego de haber pasado -un poco antes- el desvío hacia «Villa Pehuenia» (localidad a la que iremos en algún momento, nos lo prometimos). Seguimos el camino por la ruta 242 para encontrar luego el empalme con la ruta 40 hacia la localidad de Zapala. En las cercanías de esta ciudad, sobre la ruta 40, cargamos combustible en una estación de servicio que nos llamó la atención pues contaba, en su parte posterior, con un amplio parque con juegos recreativos y saludables para niños y adultos.
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| Desvío hacia Villa Pehuenia |
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| Desvío la Las Lajas, localidad que comparte nombre con el río cercano |
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| Juegos saludables en el parque |
La noche nos alcanza en la localidad de Zapala y hacemos noche allí para continuar luego del desayuno al día siguiente.
El viaje continúa rumbo a la que será una de nuestras últimas escalas en esta vuelta y que nos había quedado pendiente a la ida: Villa Chocón. Para ver el embalse (más conocido como «El Chocón») y el museo paleontológico Ernesto Bachman donde se encuentra el esqueleto de uno de los dinosaurios carnívoros más grandes del mundo hallados hasta el momento (el Giganotosaurus Carolinii).
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| Figura metálica en el desvío de ruta |
En el desvío de la ruta y el ingreso a la ciudad todo nos hace ver que es una zona paleontológicamente importante: una estructura metálica, una escultura y huellas de dinosaurios.
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| Siguiendo la huella de los dinosaurios |
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| El Giganotosaurus Carolinii nos vigila |
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| Cartel de bienvenida a la Villa El Chocón |
El embalse es un inmenso lago que ocupa una superficie aproximada del valle del río Limay de 830 km² Su longitud máxima es de 68 km y el ancho máximo de 20 km.
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| Embalse de El Chocón (desde Villa Chocón) |
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| Embalse de El Chocón (desde Villa Chocón) |
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| Embalse de El Chocón (desde Villa Chocón) |
La Represa El Chocón es una central hidroeléctrica ubicada entre las provincias de Neuquén y Río Negro, forma parte de un complejo hidroeléctrico que cuenta con una capacidad instalada de 1260 megawatts que comprende también la central del Embalse de Arroyito, emplazado sobre el mismo río Limay, 25 km aguas abajo.
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| La presa genera casi el 10% de la energía del país |
La visita al museo paleontológico nos permitió recorrer diferentes aspectos y descubrimientos que se realizaron -principalmente- durante la excavación y construcción del embalse/presa hidroeléctrica.
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| Ingresando al museo |
El Museo «Ernesto Bachmann» de Villa El Chocón, oficialmente nombrado como Museo Municipal Paleontológico, Arqueológico e Histórico Ernesto Bachmann, es un museo municipal dedicado a la paleontología, arqueología e historia de la región de Villa El Chocón y alrededores.
El MEB se encuentra ubicado en el centro cívico de la Villa, lleva el nombre de un investigador autodidacta y aficionado a la paleontología que realizó importantes descubrimientos antropológicos y paleontológicos en la zona aledaña como guía y asesor de diversos grupos de investigación nacional e internacional.
Los restos fósiles que se hallaron en el área de Villa El Chocón pertenecen a dinosaurios que habitaban una zona relativamente llana en la cual existían lagunas de baja profundidad, pero de gran extensión, unidas quizás por ríos de corriente lenta. En sus orillas vivía una variada y numerosa fauna de dinosaurios, cocodrilos, tortugas y sapos, que podrían haber sido habitantes permanentes de la zona.
El MEB exhibe réplicas de hallazgos paleontológicos de la región y también algunos restos fósiles originales. A mediados de los años 90 varios pobladores encontraron restos fósiles en las cercanías de la localidad.
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| Gigantografías informativas sobre los fósiles encontrados en la zona |
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| Esqueleto con restos fósiles y reconstrucciones de los huesos faltantes del giganotosaurus carolinii |
En 1993 se encontró el Giganotosaurus Carolinii y en 1995 se crea el Museo con el propósito de resguardar el hallazgo, se inauguró en 1997 y hoy cuenta con 4 salas. Luego siguieron hallándose restos fósiles que fueron completando las salas.
Una de las mayores atracciones del MEB es la réplica del Giganotosaurus Carolinii. Su nombre significa “lagarto gigante del sur”. Se trata de un dinosaurio terópodo que medía 14 m de largo, 4.60 m de alto hasta la cadera y pesaba entre 9.500 y 10.000 Kg, de una antigüedad aproximada de 100 millones de años. Giganotosaurus Carolinii no sólo se destaca por la talla, sino por haber sido uno de los dinosaurios carnívoros más completos descubiertos en la zona, conservando aproximadamente el 70% de su esqueleto.
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| Esqueletos/reproducciones de titanosaurios |
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| Réplica de un abelisauridae, del cual se recuperó el 90% del esqueleto |
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| Reproducciones de dinosaurios de la región |
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| Réplica de un titanosaurio |
Dentro del museo encontramos un sector donde se recuerda a Marín Bustingorry, quien donara 2500 hectáreas de campo para la construcción de la represa.
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| Fotos y documentos pertenecientes a Martín Bustingorry |
Terminada la visita al museo, haremos un par de escalas más (en Santa Rosa, La Pampa y en Junín, Buenos Aires) para finalmente llegar a nuestro hogar nuevamente. En ese camino, ya iremos planeando el siguiente destino.
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| El largo camino nos espera |
¿Adónde nos guiará el destino luego de esta recorrida? Es nuestra incógnita. La develaremos siempre, sosteniendo que, sea cual sea el nuevo camino, lo importante será el viaje y no quienes viajamos. Los esperamos porque…
Camino hacia ningún lugar: Continuamos!
